Blog ActualidadD.O. Rueda

Este 2025, el Festival de Cortometrajes Rueda con Rueda sopla sus primeras diez velas, consolidándose como un proyecto único que une la pasión por el cine con la cultura del vino. Diez años de creatividad, talento emergente y muchas historias compartidas entre viñedos y pantallas. Y lo mejor: el festival no deja de crecer.

Octubre en Rueda siempre huele a Verdejo. Las calles de nuestro municipio se preparan un año más para vestirse de música, color y tradición en una cita que ya forma parte de nuestra identidad: La Fiesta de la Vendimia de la D.O. Rueda, que este 2025 celebra su edición número 35 del 10 al 12 de octubre.

Cada octubre, Rueda celebra una de las fiestas vitivinícolas más emblemáticas de Castilla y León: La Fiesta de la Vendimia. Nacida en 1990 como una modesta reunión en torno al vino, hoy reúne a miles de visitantes y decenas de bodegas, combinando tradición, cultura y gastronomía en un homenaje al legado vitivinícola de la D.O. Rueda.

Existe un entramado oculto que horada el subsuelo de los pueblos de la meseta castellana. Se trata de joyas de la arquitectura tradicional que, escondidas para el ojo del visitante, conforman todo un mundo debajo de las casas de fachadas sencillas. Hablamos de las bodegas históricas subterráneas de la D.O. Rueda. Estos espacios, que comenzaron a construirse entre los siglos XV y XVIII, no solo conservaron vino, sino siglos de memoria vitivinícola y una manera única de entender la relación entre el tiempo, la tierra y el vino.

Hay un momento en el viñedo en el que, sin hacer ruido, la uva empieza a transformarse. Damos la bienvenida al envero, estado fenológico que marca el inicio de la recta final hacia la madurez de la uva. Si te acercas a los majuelos en esta época del año, podrás ser testigo de cómo los racimos cambian de color, el paisaje se llena de nuevos matices y el aire huele diferente.

La Denominación de Origen Rueda, en el corazón de Castilla y León, encarna más de mil años de tradición vitivinícola. Desde sus orígenes medievales hasta su renacimiento en 1980, Rueda ha sabido preservar la esencia de la uva Verdejo, adaptándose a los cambios sin perder su identidad. Hoy, sus vinos blancos reflejan una historia de innovación, arraigo y excelencia, donde pasado y futuro se entrelazan en cada copa.